La deportista copiapina triunfó en el 11º Campeonato Nacional de Velocidad, Saltos y Lanzamientos, realizado en el Estadio Mario Recordón, tras ocho años de esfuerzo y dedicación.
Con un tiempo de 13.80 segundos en la final y una mejor marca de 13.00 en etapas previas, Aracely Godoy, atleta oriunda de Copiapó, se coronó campeona nacional de los 100 metros planos en la categoría U20. Este logro, alcanzado en Santiago, consolida su lugar como una de las promesas del atletismo chileno.
Aracely, quien practica atletismo desde los 10 años, compartió su emoción y gratitud tras el triunfo: “Cumplí el sueño de mi niña interior de ser campeona de Chile. Este proceso ha sido largo, ocho años llenos de esfuerzo, sacrificios y dificultades, pero aquí estoy, feliz y agradecida”.
La deportista destacó el apoyo incondicional de su familia y su club, Esperanza y Amor, quienes la han acompañado desde el inicio de su carrera. Sin embargo, también aprovechó la ocasión para hacer un llamado urgente a las autoridades y la comunidad a respaldar a los deportistas locales.
“Mis papás han corrido con todos los gastos: kinesiólogo, nutrición, ropa deportiva, hidratación, zapatillas… Todo lo necesario para competir. Hago rifas y me las ingenio para viajar, pero todo es muy justo. No tengo auspiciadores y el apoyo económico es fundamental para seguir creciendo. Les pido a las autoridades que no solo me apoyen a mí, sino a todos los deportistas, porque el deporte es caro y necesitamos ayuda para representar a nuestra región y al país”, expresó Aracely.
La atleta, que por temas laborales se tuvo que trasladar a la ciudad de Arica, acumula títulos como campeona regional U16, U18 y U20, campeona de los Juegos Atacalar 2022 y tercera a nivel nacional en 2022, resaltó el impacto que tiene el respaldo financiero para alcanzar metas más ambiciosas. “Gracias al diputado Malla, pude costear un viaje el año pasado, y estoy muy agradecida por ese apoyo. Pero se necesita mucho más para seguir adelante”, afirmó.
Finalmente, Aracely dedicó su logro a sus padres, Alberto Godoy y Evelyn Fuenzalida, quienes han sido un pilar fundamental en su carrera. “Sin ellos no estaría aquí en Santiago. Este triunfo también es de ellos y de todos los que han creído en mí desde el día uno”, concluyó.